YO ROTO, TÚ ROTAS, ÉL ROTA...

Hola, compañeros

Volvemos tras el paréntesis de las vacaciones y lo hacemos con ganas.

Como ya sabréis, nos encontramos de nuevo con uno de nuestros debates favoritos (e irresueltos) sobre la mesa. El turno de noche. Sí, la dirección de Informativos quiere trasladar a varios de nuestros compañeros a distintos horarios para reforzar la plantilla del informativo matinal.

Hasta ahí, todo correcto. Somos los primeros en defender que ése es un informativo clave para ATLAS y que debería tomarse más en serio de lo que se ha hecho hasta ahora. A todos nos conviene que exista esa ventana de "información". Bueno, dejémoslo en que exista al menos esa ventana...

Nos interesa, en cualquier caso, que el matinal sea de veras una referencia informativa, apuntale la audiencia y ayude a reforzar el espacio con más solera y calidad de la cadena: La Mirada Crítica... Ya hemos tenido que mostrar nuestro malestar, y nuestro pésame, por la desaparición de "Entre Hoy y Mañana", informativo primigenio y origen de lo que somos actualmente.

Pero el problema son las actitudes. La nueva dirección parece que llega con ganas de bronca y sin mano izquierda. Los cambios de horario se están produciendo por el artículo 33, o sea, por las bravas.

Nuestro convenio (a lo mejor es que no han tenido la oportunidad de leerlo) reconoce que ésta es una empresa a turnos y sometida a rotación. Pero no especifica ni cuánto tiempo ni en qué condiciones se realizan esos cambios de turnos.

Así que, según nuestro punto de vista, hay que acudir al Estatuto de los Trabajadores, donde se aclara que el turno de noche debe ser siempre voluntario y, en caso de no estar de acuerdo, un trabajador no tiene por qué permanecer más de 15 días en ese turno. Obliga, por tanto, a la dirección a gestionar al personal, a hacer buenos cuadrantes de trabajo (tenemos entendido que les pagan bien por hacer esa labor, así que no hay excusa...).

Nuestra postura es, ha sido siempre, estar abiertos a la negociación. Negociar un marco de rotaciones con dos pilares básicos: reducción de horarios (30 horas a la semana para los trabajadores nocturnos) y un complemento de nocturnidad. No es cosa de locos: es lo que tienen todas las empresas que, como la nuestra, trabajan durante las 24 horas.

Para Personal es muy distinto. Ellos mantienen que, dado que cobramos el plus de Información, tienen derecho a manejarnos como peones, cambiarnos cuantas veces y por cuanto tiempo crean conveniente. Y no es así. El plus de Información está para alteraciones de horarios (un acontecimiento que nos obliga a cubrir una información puntual fuera de nuestro tiempo de trabajo), pero no para una modificación sustancial del horario. Eso es un cambio de turno.

Este comité ha iniciado el procedimiento legal para que sea un juez el que determine quién tiene razón en la interpretación del convenio. No obstante, la puerta para negociar un plan de rotaciones siempre estará abierta por nuestra parte.

Nos hubiera gustado hablar de este asunto con la dirección de Informativos. Habíamos planteado una reunión en julio, que ellos desconvocaron hasta en tres ocasiones. Lástima. ¿Nos tienen miedo? ¿O simplemente es que quieren cargarse el relativo buen clima laboral de la empresa?

El caso es que, tras presiones de Personal, la dirección de Informativos acepta reunirse con nosotros el próximo 6 de octubre. Antes, Recursos Humanos nos comunicará su postura sobre cómo interpretar los cambios de turno. Nosotros, repetimos, seguimos adelante con nuestra postura, asesorados por nuestros abogados de CGT.

Os tendremos informados de todos los pasos que vayamos dando. Pero os agradecemos de antemano cualquier comentario que nos ayude/ilustre en este tema, que promete traer cola los próximos meses.

Repetimos que la defensa del matinal es importante para todos. Si no, corremos el riesgo de que la insaciable productora Mandarina acabe hincando el diente a ese espacio... Y ya está bien de tanto compadreo. Pero esa defensa debe articularse sobre un marco negociado de rotaciones, que haga atractivo un turno ya de por sí penoso y nunca recompensado en esta empresa.

Un saludo